Thursday, July 07, 2011

¿Tenemos alma? ¿Y si no?

Cito a: Alberto Castillo Pérez

¿Tenemos alma? No lo sé. Es algo que, creo, no podremos saber sino tras la muerte y, además, quién nos puede asegurar que, en caso de existir, tenga la posibilidad de reconocerse a sí misma como tal y de comunicarnos su existencia. Yo creo que la separación del humano en cuerpo y alma no es sino una idea arbitraria que ha echado raíz y que nos evita ver que en realidad somos una unidad. Por otra parte me pregunto si la carencia del alma le quita valor a la vida humana. ¿Valen menos los besos o el amor? ¿Se vive menos bien? ¿No es la trascendencia por medio de los hijos, el trabajo, las obras un valor suficientemente fuerte incluso si no tenemos alma? ¿Qué piensas de todo lo anterior?

Tuesday, July 05, 2011

La víspera de los 26

¿Será la víspera de los 26 lo que me tiene así? Así cómo, se preguntarán… perdida, sin ser yo.

Por qué el ser humano siempre se pregunta qué hizo o qué hacer. Por qué no nos preguntamos qué hago hoy, ahora… (como Fox) … ¿o soy yo la única que piensa así?

Este escrito es una versión censurada de lo que realmente me tuvo perdida, la original la tengo yo. Digo me tuvo perdida, por que ahora ya no lo siento, me quité un costal de cosas que me ha liberado, me quité muchas culpas y responsabilidades y hoy no me siento mal, al contrario me siento libre, libre como debe de ser el humano, vivimos en un mundo de restricciones, la calles están cerradas, la comida casi siempre es a las 2 pm, debes usar ropa interior siempre, si no pagas no entras, tu mail tiene contraseña, el café es a huevo en taza, el reloj va en la mano izquierda, las mujeres cruzan las piernas, no las abren, lávate los dientes tres veces al día… y yo me pregunto por que no cuatro o cinco veces.

Pero depende de cada quien seguir las reglas, yo no las sigo, yo soy responsable de mis actos y uso el sentido común para actuar y tomar decisiones. Pero no me limito. Hago lo que quiero con prudencia.

Pues sí, la víspera de los 26 me tiene confundida, por el momento me siento bien. Qué bonito se siente hablar y escribir sin restricciones.